Se libre

Las cadenas que te imponían
cargar un mundo en tus hombros
uno que nunca fue el tuyo
por fin han cedido,
se volvieron suaves y dulces
como pétalos de azúcar.

Ahora puedes cumplir
con tu misión.

Dulce nube

Me transporto a un panal de abejas
dulces como una victoria al final
quiero llenarme de la miel de tus labios,
pero hoy debo sobrevolar las nubes.

Y yo sigo flotando ante el atardecer
en el colchón de tu pelo salvaje
no es que quiera dormirme ahora,
sólo quiero reír al ver que no es un sueño.

Voy entre pájaros con alas de fuego
se dirigen al horizonte de un cielo azul
con el sol entrecerrando sus ojos,
en el firmamento de la vida misma.

Los gorriones triunfantes descienden
cantan decididos mientras se posan
en el árbol fuente del todo absoluto,
y la primera repentina estrella se posa.

Las abejas se consumen en el fuego
la miel se derrite entre nuestros cuerpos
húmedos y envueltos en sábanas de nubes,
gritando victoria desde tus ojos llameantes.

Gimiendo orgasmos cuales estallidos,
calor impregnado en nuestros corazones
si el mundo se enfría de perplejo egoísmo,
no paremos de avivar la hoguera.